Israel, Armas probadas en combate.
Israel, Armas probadas en combate.
Antes de sacar un nuevo calzado al mercado, se le pide a un número de personas que lo prueben durante un tiempo, para asegurarse de que no causa ninguna molestia... En definitiva, asegurarse de que será rentable ponerlo a la venta.
De lo que no nos hablan en televisión y radio, es del enorme capital que mueve el negocio armamentístico y de que Israel es un gran productor, que está probando a los gobiernos de sus numerosos países clientes que la mercancía que produce es de buena calidad. Ha ocupado el groso de los medios de comunicación con su devastador y "formidable" resultado de su producción armamentística. En realidad, se le está dando publicidad a su producto de forma gratuita a nivel planetario. Los países cómplices de pasado colonialista, dicen con la boca chica que condenan las acciones de Israel, al mismo tiempo que no realizan acciones concretas para parar en seco la masacre. Se nos muestran apenados con cuenta gotas, como si se les estuviesen dando empujones para que salgan a decir algo que no quieren, ni sienten. Quizás sea la vergüenza de se saber cómplices.
Hace unos días, el fiscal de la corte penal internacional, (si, alguien que representa un organismo con tan rimbombante nombre), ha aparecido en un vídeo diciéndonos con voz tímida, algo así como que después de una profunda investigación, han llegado a la conclusión de que Israel está asesinando gente desde octubre 2023. Por lo visto, las pruebas nos llegan antes a nosotros, los ciudadanos que a ellos. Pienso que esta muestra de pasividad, se transmite a la ciudadanía y también nosotros, acabamos por no darle demasiada importancia. Nos inmunizan contra el dolor humano, mostrándonos sin cesar imágenes de personas sufriendo mientras, en sus reuniones privadas, debaten sobre cual es movimiento más conveniente a hacer o no, en función de sus intereses económicos. Así los vemos después, intentando dar la cara a pueblos que esperamos más que discursos insulsos, planos, sin sangre, y sin prisa.
Aire.
Ana V. Moreno.
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